Transformando las aulas: como la Terapia Gestalt puede revolucionar el bienestar emocional de docentes y estudiantes

Gestalt en el aula: herramientas emocionales para transformar la docencia

En un mundo donde la salud mental y el bienestar emocional se han convertido en temas prioritarios, especialmente en el contexto educativo, la Terapia Gestalt ofrece una oportunidad única para transformar, no solo las relaciones personales, sino también las dinámicas en el aula. La formación Gestalt no es solo un proceso de crecimiento y tranformación personal, sino también una manera de adquirir herramientas prácticas para mejorar la tarea docente.

Las aulas actuales se están convirtiendo en espacios llenos de expresiones en blanco, manos levantadas llenas de miedo y malestar, y estrés continuo. Los equipos docentes están atrapados en un sistema que prioriza la enseñanza académica mientras se enfrentan a un reto más profundo y urgente: la salud mental y emocional de l@s estudiantes.

Una realidad preocupante

Las estadísticas son impactantes: el suicidio es la primera causa de muerte entre l@s jóvenes de 15 a 29 años, y en España es la primera causa externa de muerte en este grupo de edad (INE, 2022; OMS, 2022). El fracaso escolar en España afecta más del 22% del alumnado, hecho que refleja no solo las dificultades académicas, sino también una grave falta de apoyo emocional y social (OECD, 2022).

¿Cómo se pretende que el alumnado dé importancia a los contenidos académicos si su mundo emocional está en ruinas?

La educación no tendría que limitarse a transmitir conocimientos, es necesario y urgente fomentar el desarrollo emocional y social del alumnado, integrando un apoyo emocional intensivo que los ayude a superar sus dificultades personales y académicas.

Según los datos más recientes del Informe PISA 2022, España continúa por encima de la media de la OCDE en cuanto a la tasa de abandono escolar prematuro, con un 22,5% de alumnado que no completa la secundaria obligatoria (OECD, 2022). La ansiedad y la carencia de apoyo emocional son factores claves que contribuyen significativamente al fracaso escolar (OECD, 2022; El País, 2023). Estos elementos, junto con la presión académica y las dificultades familiares afectan tanto el rendimiento académico como la salud mental del alumnado.

¿Cuál es el origen de estos desajustes?

El deseo de conocer es innato, así como también el hecho que, en un inicio, el/la niñ@ está conectado a su ser. Este anhelo para descubrir a menudo se va disipado cuando entran en juego juicios y comentarios que llegan de fuera (principalmente del padre o la madre, pero también de otros adultos: maestr@s, familiares o personas significativas). Estos comentarios o miradas de no aceptación quedan introyectados en el seno del/a niñ@ que, no tan solo se los cree sino que acaban condicionando su autoconcepto y, por lo tanto, también su conducta.

El/la niñ@, con el fin de conseguir la aceptación de sus progenitores, es capaz de moldearse. Y es desde este lugar que construye la idea de cómo es, qué capacidades tiene y qué valor se da a si mismo, haciéndose suya una idea que no es propia. Por la angustia que le genera la posibilidad de no ser querid@ construye una imagen ideal (a sus ojos) de sí mism@.

El organismo necesita vivir las emociones para liberar tensiones y recuperar el equilibrio ante una situación. Reprimirlas hace que queden atrapadas en el tono muscular. Algunas veces son expresadas a través de otra emoción: La tristeza suele esconder rabia contenida (en algunos entornos es mal vista y no se permite expresar). Recibir, pues, comentarios como “no llores, que no hay para tanto” o “no grites, que te oirán los vecinos” imposibilitan al/la niñ@ autorregularse. La suma de experiencias de este tipo debilita la confianza que tiene en sí mism@ y consiguen desconectarl@ de sus necesidades, perdiendo sus propios recursos.

Es así como el/la niñ@ crece viviendo en un personaje alienado de las propias necesidades, de la propia esencia que busca autorrealizarse pero que es ignorada en una gran confusión de deseos egóicos de su personaje.

¿Y nosotr@s, qué papel podemos jugar como agentes educativos?

La respuesta dependerá de la etapa educativa en la que se acompañe al alumnado. Cuánto más grandes son, más lejos están del momento de desconexión. En cualquier caso, el modelado es la herramienta que mejor llega al alumnado, independientemente del momento evolutivo en que se encuentre.

Construyendo una base sólida desde la infancia

La personalidad se construye durante el primero septenio. Es en esta etapa cuando los introyectos se absorben. L@s niñ@s se tragan todo aquello que les diga el/la adult@ de referencia, sin filtro, como si fueran grandes verdades. Es el momento de ayudar al alumnado a forjar y fortalecer un buen autoconcepto y hacerlos sabedores de sus grandes capacidades. L@s niñ@s de esta etapa todavía están muy tiern@s y responden con mucha facilidad a todo lo que es el trabajo introspectivo.

En edades muy tempranas a menudo hay que ayudarl@s a poner nombre a lo que les pasa. A pesar de estar muy conectad@s, muchas veces no encuentran las palabras (pues es el lenguaje de l@s adult@s) para hacernos saber qué necesitan. Para hacerlo, será trabajo nuestro percibir la energía que hay detrás de la acción por la cual intenta encontrar un punto de calma y cubrir una necesidad.

Más adelante, el lenguaje deja de ser lo qué l@s dificulta expresar aquello que les pasa. A menudo, no tiene tanto a ver con el que dicen sino más bien con la resonancia de aquello que dicen (y a veces de lo que no dicen). Tener una mirada abierta a todos los lenguajes permite ser sensible a todo tipo de información para tener también en cuenta como se expresan, como está su cuerpo, qué momento han escogido para expresarse, más allá de lo qué dicen.

La mirada Gestáltica en la educación

La Terapia Gestalt nos brinda las herramientas necesarias para profundizar en términos de autoconocimiento. Poner estas herramientas a disposición del alumnado permite facilitar un acompañamiento sin prejuicios. Esto quiere decir estar disponible, con una mirada de aceptación y una presencia no invasiva. Es así como el alumnado recuperará la confianza en sí mismo y se verá capaz de detectar sus necesidades y expresarlas.

Modelos pedagógicos

Como adult@s que l@s acompañamos, es tarea nuestra recordarles y ayudarles a recuperar esta capacidad de escucharse y autorregularse. Responsabilizarnos de nuestras propias emociones y de lo que nos pasa, nos permite ser un modelo para ell@s. Quizás habéis experimentado qué pasa cuando os abrís a vuestro alumnado y le hacéis saber cómo estáis.

Por ejemplo, cómo el clima del aula rebaja su intensidad el día que expresáis que no os encontráis bien u os duele mucho la cabeza. Ante un acto como este el alumnado puede entender que expresar lo que un@ siente y hacerlo saber al resto, facilita que el entorno pueda entenderlo.

Apoyo emocional

Para que el alumnado pueda abrir esta carcasa es muy necesario hacer, desde las tutorías, un trabajo de confianza en el grupo con el cual el alumnado pueda entender que aquello que le pasa puede ponerse en manos del grupo.

Si no es desde aquí, no nos podemos acoger. Nuestro trabajo consiste en tejer una red suficientemente sólida como para que el alumnado entienda que el entorno es facilitador de esta apertura.

En estos momentos en que la agresión y la desconexión están tan presente en las aulas, es necesario trabajar en la sensibilización y la responsabilidad (de un@ mism@ y hacia l@s otr@s).

Es un camino largo en el que el alumnado necesita mucha luz. La mejor ayuda que podemos ofrecerlos es ser nosotr@s mism@s. La Formación en Terapia Gestalt dota de una serie de herramientas para mejorar el bienestar emocional del alumnado y ayudarlo a desarrollar estrategias efectivas para afrontar tanto los retos académicos como los personales. La Terapia Gestalt fomenta la conexión con el momento presente y una mejor comprensión de las propias emociones, potenciando la implicación del alumnado y su resiliencia ante las adversidades.

Un regalo para ti mism@ y para lo que entregas al mundo.

Ni mil libros ni teorías pueden sustituir la experiencia

La Formación Gestalt es un proceso vivencial. Vivirlo en primera persona permite integrar los conocimientos, resignificar la propia historia y aprender herramientas que transforman la manera de vivir y enseñar.

“Ni mil libros, ni teorías, ni explicaciones pueden suplir la experiencia de vivir un proceso de autoconocimiento y transformación personal como el que propone la formación Gestalt.”

Marina Burgués y Jose Ordóñez
Alumn@ de la formación Gestalt en Espaipertu Institut

Referencias:

  • Organización Mundial de la Salud (OMS, 2022). Informe global sobre la salud mental en jóvenes.
  • Instituto Nacional de Estadística (INE, 2022). Estadísticas de mortalidad juvenil en España.
  • OCDE (2022). Informe PISA 2022: Resultados para los estudiantes.
  • El País (2023). Informe sobre la ansiedad matemática y otros temas educativos en España.
    Si quieres profundizar en este tema, te invitamos a leer nuestro artículo: "La Terapia Gestalt como aliada del docente: recursos para una educación consciente y humana"

    Herramientas Gestálticas para Docentes: como la Terapia Gestalt puede revolucionar el bienestar emocional de l@s estudiantes y maestr@s © 2024 por Marina Burgués y Jose Ordoñez tiene licencia CC BY-NC-ND 4.0

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