Algunos duelos, como el de la muerte de un ser querido, pueden ser difíciles de atravesar y para ello podemos necesitar, no solo el apoyo de nuestros seres queridos, sino también un lugar donde poder elaborar sentimientos, pensamientos, impulsos o emociones difíciles de gestionar.
Desde un espacio de profundo respeto y comprensión te podemos acompañar a transitar las distintas fases del duelo (negación, ira, negociación, depresión y aceptación) de una manera amorosa, creativa y saludable para ti y los de tu alrededor. Cuando perdemos a alguien a quien queremos nos vemos en la necesidad de construir nuestra vida desde un nuevo lugar, lo cual nos pueden llevar a una transformación profunda de nuestro ser y puede abrirnos a la experiencia de vivir con una consciencia más despierta.

Si miramos de frente nuestras pérdidas y tenemos el valor de abrirnos a sentir el dolor, la rabia, la tristeza o, incluso, la desesperación, podemos alcanzar también la sabiduría que todas ellas atesoran en su interior.

Las grandes o pequeñas pérdidas de nuestra vida dan espacio a lo nuevo, a nuevas aventuras, a nuevos compañeros de camino, a partes desconocidas de nosotros mismos que están por explorar y potenciar. Te podemos acompañar también a que descubras estas oportunidades que te brindan las pérdidas.